Abril comienza a morir. La primavera deja entrever en estos días, largas y cálidas tardes donde la alegría toma el mayor de los sentidos y la luz es el pilar maestro de esta bella historia de amor.
Naranjas, ocres,… El cielo parece haber elegido a la vieja Hispalis para posar en ella toda la fuerza de sus manos que quieren ser Cupido cuando torna a ocaso.
Los vencejos narran sus cuentos con líneas curvas y renglones pausados a la caída de la tarde.
Es el tiempo de la ciudad, donde Sol funde su cuerpo con la piedra maestra sin olvidar que vivimos en un lugar soñado, mágico... Es ahora cuando farolillos taparán pronto este cielo sólo por una semana. Romance cadmio que morirá allá por noviembre… PRIMAVERA.
Fotografía: José Javier Comas Rodríguez
4 comentarios:
¡Qué barbaridad de foto!. Enhorabuena.
Me encanta tu blog, su contenido y tus fotos.
Un saludo.
Sin palabras. Esta fotografía tiene la textura de una pintura. Espectacular. Felicidades de nuevo.
un abrazo.
Guillermo Ramírez Torres.
Comas, que burrada de foto. Es un cuadro, una pintura, es... espectacular. Sin palabras, de verdad. Enhorabuena artista, sigue así. Un abrazo.
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